El 19 de marzo y el 2 de mayo
El 19 de marzo y el 2 de mayo son dos fechas muy significativas en la historia de España. El motín de Aranjuez y la toma de Madrid por el ejército napoleónico son los hechos que las identifican.
Nos encontramos en una España en la que reina Carlos IV y en la que su hijo, el Príncipe de Asturias, Fernando VII le disputa la corona. Godoy es el principal ministro de la corona y los españoles no están muy satisfechos con él, para colmo deja las puertas de España abiertas a los franceses para que la atraviesen como si fuera su casa e invadan Portugal. El número de galos que está «de paso» por España va en aumento y ocupan plazas importantes. La familia real española se dispone huir y el pueblo trata de impedirlo por medio del conocido motín de Aranjuez. Los hechos se desarrollan con gran velocidad y, su protagonista, Gabriel Araceli se encuentra en medio de todo.
Gabriel trabaja como cajista en una imprenta y cuando puede vaa ver a su amada, Inés, quien vive, tras la muerte de su madre, con su tío Celestino, un anciano sacerdote. Un día aparecen por la casa de la joven los Resquejos, dos hermanos, primo y prima de la fallecida madre de la joven que, ofreciéndole el oro y el moro se la llevan a Madrid con oscuras intenciones. El tío de la muchacha, inocente hasta decir basta, otorga y la muchacha marcha pero el joven Gabrielillo tiene la mosca detrás de la oreja y, siguiendo los pasos de su amada, se coloca a trabajar como mozo en el negocio de los dos hermanos conociendo de primera mano la historia que se traen con la joven Inés. Así pues Gabriel empieza a maquinar la forma de poder liberarla de su suplicio y, en medio de todo esto, el horror de la guerra, las batallas de calle, el infierno…
Cada vez me alegro más de la iniciativa de isi, que con su lectura conjunta ha hecho que yo desempolvé viejos libros y que disfrute con ellos como una enana. Cuando leo a Pérez Galdós me doy cuenta de la historia que carga la vieja Hispania a sus espaldas y de como los hechos se repiten en un bucle una y otra vez.
Un libro nuevamente escrito con humor, con la voz de la calle y con una gran acción de la cual, en mi opinión carecían los dos capítulos anteriores, incluido Trafalgar. Narra, con pulso firme, la heroicidad de un pueblo, el autor baja a la calle para acompañarles en estos momentos.
El final de este episodio es inimaginable, y hace que desee saber pronto cómo se soluciona el problema en el próximo episodio.
Si sois de los que aún pensáis que los Episodios Nacionales son infumables y yo aún no he podido convenceros de lo contrario no sé qué más puedo deciros. Dadles una oportunidad, vale la pena.
TÍTULO: El 19 de marzo y el 2 de mayo
AUTOR: Benito Pérez Galdós
PÁGINAS: 216 págs
EDITORIAL: Alianza editorial
AÑO DE EDICIÓN: 2004
PRECIO: 9,50 €
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De Pérez Galdós leí algunas de sus novelas más conocidas pero no los Episodios Nacionales. Y al ver las reseñas de este en contreto me ponéis los dientes largos porque es una deuda que tengo con este gran escritor de nuestras letras. Espero que para este próximo año cumpla mi deseo de leer algunos de sus famosos episodios nacionales. Besos.
¡Estupenda reseña, Eva! Has resumido perfectamente los detalles más significativos del momento histórico en el que se desarrolla esta entrega, además de proporcionar las claves del entramado ficticio en torno a Gabriel. En pocas palabras, cualquier lector que pase por esta entrada no debería dudar en adentrarse en estos episodios. Al igual que tú, estoy deseando saber lo que ocurrirá tras el desenlace de esta novela. ¡Un abrazo!
De Benito Pérez Galdós leí alguna de sus novelas pero no así los famosos Episodios Nacionales. Es un reto que me tengo propuesto para el próximo año. Besos.
Estos clásicos es ver la historia casi desde a pie de calle
Qué bien Eva que este episodio te haya gustado más que el anterior, no me extraña porque es trepidante y tiene de todo: humor, aventura, amor… y todo tan bien escrito, y en un número de páginas récord ¡no llega a las doscientas!
Eso, eso, que sepa el mundo entero que merece la pena ir leyéndose estos libros y que tampoco hace falta leerlos todos seguidos, que poquito a poco y con lo ligeros que son, se pasan en un suspiro.
Gracias a ti, Isi y a Mónica por todo el trabajo de la organización.
Totalmente de acuerdo; nos hemos dado cuenta de que nuestra historia se repite una y otra vez, y que desgraciadamente siempre acaban pagando el pato los de abajo, con los que hemos luchado a pie de calle en este episodio. Yo lo he disfrutado también muchísimo!
Por cierto, que Mónica y yo lo organizamos, pero en realidad fue Loque la que nos incitó a leer a «DonBe» desde el principio, así que hay que agradecérselo a ella 🙂
Muchos besotes!!
Yo le he encontrado menos humor que en los anteriores pero, sin embargo, es el que más he disfrutado gracias a los maravillosos y bien perfilados personajes…
Beso,
Los estoy leyendo, intercalándolos con otros títulos, y me resultan muy amenos e interesantes. Hace una semana terminé de leer Zaragoza, el sexto episodio. Poco a poco espero acabarlos.
Que me gusta ver tantas reseñas positivas de estos libros! Si es que Galdós crea adicción. Una magnífica reseña!!
Besotes!!!
Me compré la colección completa en mis tiempos de estudiante y la tengo metida en una caja a espera de poder leerla. Es de esas lecturas que sé que tengo pendientes, pero que no sé cuándo me pondré con ella. Y si, Eva, a mí me has convencido y quiero leerla pronto. Besos
Yo me compre también la colección hace años Bibi y por ignorancia al comenzar la lectura conjunta me he dado cuenta de que… ¡Me falta el último episodio!
Con estas lecturas de los Episodios Nacionales me estoy dando cuenta de lo mismo que tu has comentado, que nuestra historia es un bucle. Solo cambio el año y el nombre de los protagonistas. Está claro que no aprendemos.
A parte de eso me estoy divirtiendo por el humor con el que Don Benito es capaz de contar todo.
Un saludo.
¿A qué si Mariuca? En resumen una pena la historia un disfruté la lectura.
Yo los leí todos seguidos y se me hicieron cortos, y este episodio me pareció históricamente perfecto, no descarto leerlos de nuevo, especialmente éste,
besucus
¿Todos, todos, Porlomenix? ¡Qué nivel!